Si uno vive el presente a full, sin pensar en el futuro, ¿está cerrando puertas? ¿O solo es realista y abraza el famoso carpediemismo? O sea, si vivo lo que tengo tal vez arruino lo que vendrá, pero si me pongo a planear, seguro se me viene abajo un presente muy placentero y disfrutable... por algo que vaya a saber si existe, además. ¡Qué intríngulis! Quiero una bola de cristal que sea reciclada, reusable y reducida: si no planifico el mío, intentaré ser ecológicamente correcta y velar por el futuro del planeta al menos.
Aunque pensándolo bien, ¿a quién quiero engañar? ¡Cómo si pudiera elegir! Esperen que busco un pupitre para treparme encima.
lunes, 18 de enero de 2010
¿Intríngulis?
viernes, 15 de enero de 2010
Audrey Kawasaki
Hace tiempo investigué bastante para esta entrada, pero no sé cómo, al final se me olvidó totalmente; por fin hoy, cuando se me dio por organizar mis marcadores en la barra de Google, me encontré la etiqueta Audrey Kawasaki y una cantidad de material sobre ella dentro, largamente postergado. Y bueno, en la Biblia escrito está: ’los últimos serán los primeros’... frase que se hace bien cierta en un blog, donde el primero es el último y el último el primero.
Audrey Kawasaki es norteamericana de ascendencia japonesa, nació en California hace casi 28 años pero ahora vive en Nueva York; estudió pintura en el Instituto Pratt de Brooklyn, aunque no se graduó. En este momento acaba de terminar su primera exhibición sola en la Jonathan Levine Gallery de Nueva York.
No recuerdo bien cómo llegué a su obra, pero sí que desde el primer momento me impactó. Sus pinturas tienen una mezcla de inocencia y erotismo atrapante, además, Audrey pinta sobre madera, y el grano del material se integra a la pintura de forma maravillosa. Si a eso le agregamos el aire melancólico de las figuras y los elementos sugerentes que agrega a sus composiciones (aves, huesos, flores, animales marinos...), hacen de su pintura algo realmente muy especial y su estilo muy particular, como lo describen perfectamente en la web de la artista: "una fusión entre el Art Nouveau y el manga japonés".
Ojalá les guste tanto como a mí.
miércoles, 13 de enero de 2010
Google sugiere. . .
EriSada no es un blog tecnológico, y la verdad no me preocupo mucho por la tecnología hasta que la necesito, así que no se me había ocurrido investigar el hecho de que Google te ayuda a buscar con ‘sugerencias’ o Google Suggest; creo que es más o menos reciente, pero no estoy muy segura, cuando apareció lo empecé a usar y listo.
Básicamente lo que ofrece Google son términos de búsqueda a partir del texto que el usuario va introduciendo, además de indicar la cantidad de resultados que existen para cada una de las ‘posibilidades’. Lo gracioso es que ya te va ofreciendo sugerencias a partir de la primera letra que ingresás, pero obviamente éstas se van acotando a medida que escribís. Según los cerebros detrás de Google ‘este servicio facilita el completar formularios, reduce errores ortográficos, y ahorra movimientos en el teclado’.
Por ahí todo muy bien -estoy encantada de que me ayuden a completar formularios, reducir errores ortográficos y me ahorren movimientos en el teclado- pero hasta hoy no se me había ocurrido pensar mucho en lo que Google te proponía. El tema es que yo supongo, supongo nomás, que las sugerencias que aparecen primero son las más consultadas, o sea que no sería Google el que sugiere sino los propios usuarios al realizar sus búsquedas. Teniendo en cuenta esto, y siguiendo la sugerencia de un amigo (valga la redundancia), hice esta prueba... fíjense:
Y luego ésta, vuelvan a fijarse:
Sin palabras, ¿no?
martes, 12 de enero de 2010
Tarta de frutos del bosque
Con el ocio de las vacaciones, me ha dado por cocinar. No es raro, cuando me aburro suelo hacer eso, y ahora tengo mucho tiempo en mis manos (y bocas con quien compartir mis producciones: mi hermana y mi prima con sus familias están pasando el verano en casa de mis padres, así que cocino sin sentirme culpable, ¡a gatas me toca una porción!).
Adoro cocinar, me entretiene, me desestresa y me pone de buen humor. Lo disfruto y generalmente me salen bien las cosas (con algunas deshonrosas excepciones, obvio). Mi orgullo culinario me lleva a intentar siempre mejorar, y cuando lo logro, me luzco; me encanta que disfruten lo que cocino, que hagan ‘mmmm’ y ‘ahhh’ y todos esos ruiditos de placer tan placenteros. Creo que cocinar debe ser algo atávico en las mujeres, aunque soy conciente de que a muchas no les gusta; serán más evolucionadas tal vez, a lo mejor estamos pasando de ser fêmina culina a fêmina deliveris. Vaya a saber.
Pero bueno, definitivamente yo sigo siendo fêmina culina, y me gusta. El tema es que también soy fêmina gravis: sé que peco de pesada y reiterativa; canso, lo tengo claro. Anoche cuando probamos esta tarta que preparé para el postre, mi hermana y mi prima se aburrieron de que les explicara la receta. Y bueno, como en la vidafueradelblog canso, aprovecho la vidadentrodelblog para seguir cansando, pero sin ver las miradas de ‘qué pesada está’. Gran diferencia.
Ah, y de esta tarta sí saqué lindas fotos, bah, al menos aceptables, así que la tarta, las fotos y la cargosería, son todas mías, la receta es una adaptación de una que vi en la tele.
Tarta de frutos del bosque
Masa: Hacer la misma receta de tarta que para el Lemon pie, y cubrir una tartera enmantecada con la masa.
Relleno: Colocar 4 tazas de frutillas, 1 taza de arándanos y 1 taza de frambuesas frescas y limpias en un bol; en otro bol, mezclar ½ tazas de harina, ½ tazas de azúcar y 1 cucharada de maicena. Luego, combinar esa preparación con las frutas, cuidando de no romperlas, al final agregar un chorro de coñac, jerez o alguna otra bebida espirituosa que tengan en la cocina.
Cubierta: Mezclar ¾ taza de harina, ¾ taza de azúcar y una pizca de nuez moscada, agregar 70 grs. de manteca cortada en cubos y trabajar con dos cuchillos o las manos hasta lograr una textura como de miguitas.
Verter la preparación de frutas en la tartera haciendo una pila en el centro, esto es importante porque las frutas se irán hundiendo y distribuyendo a medida que se cocinen. Cubrir las frutas con la mezcla de la cubierta, y agregar pequeños pedacitos de manteca encima, del tamaño de arvejas, más o menos.
Colocar la tarta en el horno precalentado a 250º por 20 minutos, luego bajar la temperatura a 200º y hornear por 40 minutos más. Cuando falten más o menos 10 minutos de cocción, espolvorear la tarta con azúcar y terminar de hornear (conviene poner la tartera sobre una asadera más grande, ya que los jugos de las frutas pueden gotear y ensuciar el horno).
domingo, 10 de enero de 2010
Vórtice temporal
viernes, 1 de enero de 2010
Lemon pie
Así como yo tengo mi torta de frutillas, Eli tiene su postre favorito, que es el Lemon Pie, y este año creo que empezó una nueva tradición, porque me pidió que le hiciera uno para su cumple que fue hace unos días. Mepa que estaré condenada a hacer lemon pie todos los cumpleaños de su vida, muchos y muchos años de condena, espero (también espero no convertirme en una madre desnaturalizada y prepararle su lemon pie todos sus cumpleaños, sin importar las circunstancias ajenas a esa fecha).
Miren qué lindo me quedó, y les aseguro que estaba tan rico como lindo, me sale muy bien el lemon pie, modestia aparte. Ya sé, estarán diciendo: “pero esta foto la sacó de Internet...” y tienen razón: le saqué fotos a mi lemon pie, pero mis dotes de fotógrafa son mucho menores que mis dotes de cocinera. Síganme el juego y digan: “¡qué lindo le quedó!” y todos contentos.
La receta me la pasó mi compañera Elena hace tiempo, pero ya me apropié de ella con mis propias modificaciones y como no soy egoísta como las cocineras de antes, se las paso a ustedes para que se luzcan también, les aseguro que es infalible... ‘cooker-proof’, como dirían en inglés. Ah, y es la variedad que queda como un mousse de limón, y no crema, la más rica, en mi opinión.
Lemon Pie
Tarta: Mezclar 50 gr manteca, ¼ taza azúcar, 1 huevo, ½ cta ralladura de limón, 1 ½ taza harina, 1 cta royal, ¼ cta sal.
Si tienen procesadora grande, pueden ir poniendo los ingredientes en ese orden y preparar la masa allí, queda súper suave y homogénea (se puede agregar un chorrito de líquido si ven que fuerzan mucho la máquina). Una vez lista, forran una tartera enmantecada y la llevan a la heladera una media hora (esto es para que la masa no se encoja en el horno) antes de hornearla.
Relleno: Batir 3 yemas con ½ taza azúcar; cuando la yemada esté bien armada, agregar ralladura de limón, 1 cda de maicena y 2 sobres de gelatina sin sabor. Mezclar todo y agregar ¾ taza de jugo limón, ¾ taza de agua y un buen chorro de limoncello o licor de limón, le dará un toque especial (aunque no es obligatorio). Llevar la mezcla a fuego lento hasta que apenas hierva y espese. Retirar y esperar a que esté frío pero no coagulado.
Por último, batir 3 claras a nieve con ¾ taza de azúcar. A este merengue agregarle con movimientos suaves la mezcla de limón.
Enfriar en heladera y cuando la gelatina se haya cuajado, cubrir con merengue abundante; yo hago un merengue que no sé de qué nacionalidad es, seguro ni francés, ni italiano, ni suizo... pero que queda perfecto y es muy fácil de preparar (si quieren esa receta también, me la piden). Se puede gratinar en el horno, pero tengan cuidado porque el relleno se puede volver a ‘licuar’, lo ideal supongo que es un soplete repostero, pero como yo no tengo y siempre me da miedo arruinar el postre con el calor, dejo el merengue natural nomás.
¡Que les quede rico!