si usted sabe
que yo ahora estoy celosa
por lo que me ha dicho,
tenga al menos el detalle de no hacérmelo notar durante
la cena.
(Nunca en mi vida enrollé espaguetis con tanto odio.)
-
Ella había decidido que quería que él la recordara. Eso fue lo primero, esa determinación. Después se dedicó a pensar qué quería que recordara. Era claro que no se iba a acordar de ella en su totalidad, la gente no se acuerda de todo de otras personas, aun aquellas que fueron importantes en sus vidas. Los rostros se desdibujan, las vivencias se nublan y confunden, los detalles se pierden. Uno recuerda partes del otro, a veces buenas, a veces malas; aspectos importantes o pequeñeces. La memoria es una cosa extraña: selectiva y caprichosa. A ella no le gustaba esa cualidad distraída de los recuerdos. Quería que él la recordara por algo que ella pudiera controlar.
Se paró frente al espejo, mirándose con cuidado. Lindo pelo, oscuro y brillante. Buena piel, suave – él siempre le había elogiado la piel. Ojos inteligentes, sonrisa abierta, boca sensual. Así la había descrito más de una vez. Giró despacio. Pechos grandes y pesados, pezones rosados; le gustaba besarle los pezones. Se miró bien, crítica. Era linda, sí. Pero no había nada demasiado especial, hermoso o destacable en su cuerpo. En realidad no le interesaba que recordara ninguno de esos rasgos en particular. Difícil que pensara en su boca cuando besara otra boca, o en su piel cuando sus manos acariciaran a una nueva mujer.
No. Tenía que ser algo diferente. Hay gente que comparte una canción, pero ella no era Ilsa ni él Rick. Tampoco tenían París. Ni siquiera Montevideo. Y la verdad era que no sabía si quería que la asociara con una ciudad.
Decidirse a construir una memoria no era algo fácil. ¿De qué cosas se acordaba la gente? ¿Qué disparaba un recuerdo? ¿Imágenes, sonidos, sabores, aromas…?
Aromas.
La torta de manzanas de la abuela, el humo de marihuana en los baños del liceo, la piel tabacalera de su primer amante, la pureza de sus bebés… su vida podría contarse con una sucesión de aromas. Nunca podría sentir alguno de esos olores sin remitirse al Original.
Decidir cuál sería su perfume fue fácil. Nada de flores: rosas, jazmines, violetas… no. No le gustaban los lugares comunes. Nada de maderas ni musgos, demasiado masculinos. Almizcle, pachulí, sándalo... muy dulces, no iban con su personalidad. No. A ella le gustaban los perfumes cítricos y livianos. Desvergonzados. A ella le gustaban los limones.
En el fondo de su casa infantil había un patio español, y en el centro, como en un altar de mayólicas, un limonero añoso. Lo tenía bien presente. Azahares en setiembre, ramas pesadas de amarillo en enero. Un limonero tan grande que tentaba a treparse, solo para detenerla las espinas. Recordaba los limones frescos en la canasta de la mesada, y en la garganta la limonada.
¿Qué mejor forma de grabarse en su memoria? Un aroma tan familiar y a la vez original. Lo imaginaba partiendo limones y pensando en ella, tal vez excitándose con el recuerdo. Sí, estaba decidido, serían limones.
Se puso en campaña con el mismo entusiasmo con que emprendía todos sus proyectos. Eligió el perfume más alimonado que pudo encontrar, consiguió aceites, cremas y jabones de la misma fragancia, y no usó ninguna otra. Ya había encontrado su perfume perfecto, y sin llegar a los extremos de Grenouille.
Cada vez que lo veía se preparaba esmeradamente. Al bañarse, extendía la espuma aromática por su piel, dejándola absorber la fragancia, y aspiraba profundamente ese aroma a limones que la trasladaba a los días de su infancia fresca y vital. Luego, aún húmeda, se aplicaba el aceite perfumado acariciándose como un amante amoroso y volvía a sentirse mujer.
Finalmente, se perfumaba. Perfumaba su piel allí dónde estaba más caliente y la sangre latía afanosa. Su nuca, detrás de las orejas, el pulso, la parte interior de sus codos y rodillas y el pliegue de su escote. Perfumaba su cabello, dónde nacía, y lo recogía para aprisionar la fragancia y soltarlo en el momento justo. Perfumaba su ropa y sus pañuelos. Hacía que su presencia se expandiera a su alrededor cual halo mágico y alimonado.
Se convirtió en experta en la alquimia del perfume.
Ella sabía que él lo apreciaba. Se le acercaba inspirando profundamente; le besaba la nuca y suspiraba. Más de una vez le había dicho que le gustaba su aroma, y mencionado los limones como una fruta tentadora. Y en el sueño se arrellanaba contra ella, sumergiendo el rostro en la almohada de su pelo.
Estaba satisfecha.
Una noche, después de una apasionada sesión de deporte sexual, se acomodó a lo india en la cama, contenta y serena. Tenía las sábanas enredadas en los muslos, el cabello largo cubriéndole el pecho y la boca ansiosa de algo fresco. Medio distraída, estiró una mano hacia el bol de cristal que tenía sobre la mesa de luz, tomó una frutilla grande y roja y la saboreó con gusto, como era su costumbre después del amor.
Era un ritual infaltable, las frutillas de ella y el cigarrillo de él.
Desde su lado de la cama, los ojos entrecerrados por el humo, él la miraba. Con un movimiento fluido que la sorprendió, le sacó la fruta a medio comer de entre los dedos, se la metió en la boca y la besó con ansias, embriagándose con ese cóctel de mujer y frutillas. Antes de que tuviera tiempo de responder el beso, él se apartó otra vez.
“Creo que nunca más voy a comer frutillas sin pensar en vos,” le dijo.
A ella la carcajada le salió del alma, tanto hacerle el amor a los limones y él la recordaría por las frutillas.
“Me parece muy bien,” le contestó risueña cuando pudo volver a hablar, mientras se lamía los dedos manchados de rojo, y con olor a limón, uno por uno.
No sé si sabían que Antel organizó, hace un par de meses, el '1º Concurso Nacional de Minicuentos por SMS'. Los cuentos no podían tener más de 160 caracteres (espacios incluidos) y debían ser enviados vía SMS al 827 o TC(uento)Q.
Muchísima gente decidió que tenía pasta de escritora y la convocatoria fue masiva. Casi 42.000 minicuentos fueron enviados al 827, y el jurado compuesto por los escritores Mario Delgado Aparaín, Helena Corbellini y Carlos Liscano anunció ayer a los seleccionados. El feliz ganador se hizo poseedor de una preciosa laptop y servicio de Internet por un año, los diez siguientes recibieron tarjetas de teléfono de 500 pesos y los 89 restantes aparecerán en el libro “T Cuento Q, el libro de los cien minicuentos” que publicará la Biblioteca Nacional.
Obviamente, yo también participé. Envié varios minicuentos al 827, pero no gané nada. Una pena.
Aunque en realidad no puedo decir que no ganara nada… Claro, no gané la laptop, ni 500 pesos en minutos, ni voy a aparecer en el libro, pero sí la satisfacción de que la mayoría de la gente que leyó mis cuentos me dijera que estaban lindos.
Incluso este blog es consecuencia directa de ese concurso, bajo sugerencia de la Vaga. “Escribís bien, guacha,” me dijo. “Deberías hacerte un blog.” Y como soy bien mandada, aparte de majadera y fanfarrona, acá tienen mi blog. Y mis minicuentos.
(Nótese que cada párrafo es un minicuento independiente, esto va para la Estrella)
Huélala. Muérdala despacio… deje que el jugo le endulce la boca. Arranque la pulpa y trague con gusto. Ahora imagine que soy yo.
Gruñe irritada: hambre. Necesita acostumbrarse, lo sabe. Pero vivir muerta -aun con sus ventajas- arruina la estética de todo. A ella nunca le gustó el rojo.
“Soltame,” le advirtió tranquila. Él no la escuchó y trató de besarla, una mano en su pecho. La navaja fue más elocuente. Se lavó las manos antes de irse.
Ofelia dormida entre lirios. Así te ves, amor, bajo el espejo del agua, ahora quieta. ¿Desde cuándo la muerte no es hermosa?
“Nunca hice algo así. Mi mujer, ¿sabe? Ella está-” La puta prendió un cigarro y arqueó una ceja. “¿Qué? ¿Fea, loca, de acuerdo?” Él le miró las tetas. “Muerta.”
Dejaré la ventana abierta, la cama sin llave. Mi cuerpo dispuesto esperándolo en ella. Pero no se equivoque, yo sí tengo candado, tranca y cerrojo.
Tenía la certeza de que moriría virgen. Con una mano de uñas muy rojas tironeó la sábana y le tapó la cara. Otro necio. No entendía por qué nunca le creían.
Abrió los ojos. Él dormía a su lado, la cara enérgica suavizada por el sueño. Besó el recodo de su boca, y lo oyó suspirar. Satisfecha, se volvió a dormir.
El leve aroma a limón y piel suave lo arrancaron del sueño. Una sonrisa invadió su rostro al recordar la noche pasada. La piel le hormigueó de deseo. Otra vez.
“El Diablo me obligó”, repetía una y otra vez. “Él me obligó.” A sus pies, la sangre se empozaba. Más allá, dónde sólo ella podía verlo, el Diablo sonreía.
El húmedo, secreto placer de su lengua buscando la mía era intoxicante. Por un momento que duró muy poco, mi mundo se redujo a él y el beso que compartíamos.
El puño se detuvo, al fin. El hombre evitó esos ojos fijos, pero por un momento, su mirada le acarició el cabello largo, ahora sin brillo. Luego se alejó, sin mirar atrás.
No dormía, aunque sus ojos cerraban. Los dedos de ella le recorrieron la cara, como tratando de tatuarla en su memoria. “¿Te dije que te amo?” “Hoy no.”
Ella se mordió el labio, irritada -un gesto demasiado femenino para esa cara deformada e hirsuta. “¡No otra vez!” La luna llena, de arriba, parecía burlarse.
Mi mujer siempre olía a limones recién partidos. Y era igual de ácida. Sigue siendo. Desde que la maté no he podido disfrutar de una limonada.
Un reencuentro casual. El café que se enfría en la taza. El sonido de tu voz me aturde y tus ojos me encandilan. Tu mano en la mía me trae a tierra. Nos olvidamos de la propina.
“¡No quise lastimarlo!” dijo desesperada. Se miró las manos rojas de sangre y luego al agente, implorante. “Es que el cuchillo se me escapó… veintidós veces.”
Ya es tarde para mí. Debí atender la advertencia tatuada en tu frente, pero alcanzó una probada de tu boca para contaminarme. Sos tóxico y no hay antídoto.
La desnudista se desprendió el top y lo lanzó al público. Los tipos saltaron para alcanzarlo, cual solteras en una boda soñando el ramo - aunque menos ferozmente.
Confusa, se miró los dedos rotos y al ángel ceñudo que la acusaba desde la cripta violada. Quiso respirar y no pudo. Recién ahí se dio cuenta de que estaba muerta.
Hoy es tu cumpleaños. Y acá estoy, viendo como la lluvia desborda pequeños ríos en el cristal mientras trabajo. No te culpo si no me esperás, yo no lo haría.
Ausente, miró la sangre en su brazo. Él la había cortado ahí, recordó, y más, antes que lo matara. El anillo de una lágrima clara se dibujó en el rojo, limpiándolo.
The hand caressed her back, under the nightgown. Alessa protested and slapped it away. Stubbornly the hand moved again, this time around her nape, caressing, cajoling; moving her long hair away. The other hand moved along her spine, tracing little circles down to the small of her back. Alessa stirred and smiled. She kept her eyes closed though, and enjoyed the mounting feeling. Soon the mouth joined the hands on their job, and it started placing little kisses on her warm skin. She felt her nightgown being raised up her legs and past her arms and head.
Still she pretended to sleep.
Alessa felt him kneel by her side, and his hot breath on her skin; goose bumps formed in her back and arms. His hands continued their sweet cajoling and hers clamped on the wrinkled sheets. She bit her lip to refrain a moan as he kept on caressing and kissing her, from nape to waist, concentrating on the skin of her back, not saying a word. When she felt she couldn’t stand it any more and tried to turn around to respond to him, his hands turned strong and kept her face down. She sighed and gave way to the game.
“Chance,” she whispered, “I...”
“Shh,” he interrupted and leaned to silence her with a kiss. Her mouth bit his, hungry, but he retired before she could stop him. Frustrated, she tried to turn again, only to be stopped once more. “Not yet,” he said and she moaned again, in anticipation.
Finally, she felt him lie on top of her and just stay there. She welcomed his familiar weight on hers and smiled again, her arms stretching backwards to hold him. He took her hands in his and led them back towards the mattress, beneath her body. With a swift movement, he reversed their positions, now with him beneath her, but still not facing each other. Alessa laughed, and giving up any pretense, she leapt forward to disentangle from his hands, turning to face him.
It was very dark and only the moon’s silver reflection on the mirror on the wall faintly illuminated the room. However, it was enough to see her lover, enough to see the vampire's yellow eyes glowing on his face.
“Hello Alessandra,” he said, and started to laugh.
She cried.
Her screaming woke him. He jumped in confusion to find her sitting up in bed clutching the covers and screaming. Her eyes were open, but unfocused. He grabbed her shoulders and shook her, getting no response.
"Alessa! Wake up. It's just a dream." He shook a little harder and was surprised when he received a hard blow on his jaw. She jumped over him and they both fell to the floor, her fists still showering blows on his face. Trying to avoid her hands without hurting her, Chance grabbed her arms and tried to still the hysterical woman in his arms.
“Alessa!!” he cried again, “Stop it, love! It’s me, it’s Chance!” But she didn’t hear him, she couldn’t hear him. Surprised, he noticed that she was naked and involuntarily he stirred. Annoyed with himself, Chance slapped her with a little more force than he had intended.
The blow was effective, though; Alessa stopped struggling and looked at him. He was relieved when sanity crept into her eyes and the screaming stopped.
“Chance?” she asked, and he nodded, a little shaky, letting go of her arms but uncertain of what to do next. He almost fell down on his back again when she threw herself into his arms, this time to hold him. “Oh, Chance!” Alessa closed her eyes, and buried her face against her lover's neck. The harder she tried to fight it, the harder she cried. Her entire body shook with each sob as she clung to him.
Chance wrapped her in his arms and held her tight as she cried. He didn’t tell her to stop. He hadn’t seen her cry like this in all the time they had been together. He just let her cry.
On the other side of the city, the vampire lost the connection with his prey, but he kept on laughing.
Volverse a enamorar.
Besar una piel que sabe distinto,
no encontrar puntos de referencia
que indiquen el momento justo, la caricia perfecta,
la mano compañera.
Retornar a un cuerpo nuevo
sin los huecos del anterior,
no poder palpar una nuca excitada,
una espalda con escalofríos conocidos.
Qué pobre se queda el intento de amar igual a la primera vez.
Cómo pesa una boca tan sabida,
tan llena de humo compartido
ante la desconocida tan poco explorada, tan miedosa.
Cuánto cuesta abandonarte, lavarme de tu olor,
quitarme las huellas de tu peso,
desdoblarme en otra Almudena
y comenzar a hacer mía una figura
de la calle que me asusta y que ¿quiero?
poseer, pero... tú, ahí estás tú,
traspasando con tu desnudo mi sombra,
consolándome pesaroso de mi dolor al terminar,
tu sonrisa y tu cigarrillo,
ese brazo moreno rodeando mi cintura
y llevándome a un lecho desordenado...
y tus manos de violinista
volando y enredándose en mis senos.
Me enteré de que existía el Discordianismo por mi amigo Adam hace varios años ya. Él se pronuncia un adepto Discordiano, y seguidor de la diosa Eris (entre otras cosas). Creo que me empecé a interesar por esta difícil deidad recién ahí.
Eris
Como buena lectora de mitología, ya había oído hablar de Eris y la manzana de la discordia, pero realmente no me había interesado demasiado. Es que Eris es una diosa con un mal agente de marketing, sin dudas. ¿Quién no conoce a Afrodita? Está bien, acepto que Afrodita es un caso aparte, pero la gente reconoce nombres como Ares, por ejemplo, y Ares era el hermano de Eris; o a Hermes, el más veloz del Olimpo. Artemisa también es bien recordada, y lo único que le gustaba hacer era cazar y esconderse de los hombres. Hoy en día, si uno menciona a Eris lo más probable es que le digan: “Ah sí, el nuevo planeta.” Realmente, la diosa debería contemplar cambiar de agencia de publicidad.
Sin embargo, Eris tiene algo que estas otras figuras más famosas no: adeptos. Hace unos cincuenta años empezó un movimiento religioso moderno en torno a su figura, el Discordianismo.
Al parecer todo empezó una noche en los ’60, cuando dos jóvenes californianos, conocidos después como Omar Ravenhurst y Malaclypse el Joven tuvieron una revelación en la que el tiempo se detuvo y un chimpancé les mostró un pergamino con un diagrama dibujado – una especie de Yin-Yang con un pentágono de un lado y una manzana con la inscripción ‘Kallisti’ (para la más bella) del otro, que representaba el orden y el desorden complementándose. Esto fue suficiente para moverles el piso, claro, pero para su mayor asombro, unos días después, en un sueño, a los nuevos mesías se les presentó la diosa misma y les hablo:
He venido para deciros que sois libres. Hace muchos años, mi conciencia dejó al hombre para que se desarrollara. Regreso y me encuentro con este desarrollo acercándose a su completitud, pero obstaculizado por el miedo y los malos entendidos.
Habéis construido para vosotros armaduras psíquicas, os habéis fortificado en ellas, vuestra vista está restringida, vuestros movimientos son torpes y dolorosos, vuestra piel está amoratada, y vuestro espíritu quemado por el sol.
Soy caos. Soy la sustancia con la que vuestros artistas y científicos construyen ritmos. Soy el espíritu con el que vuestros hijos y payasos ríen en feliz anarquía. Soy el Caos. Estoy viva, y os digo que sois libres.”(Principia Discordia)
Era evidente que a Malaclypse y Omar no les quedaba más remedio que crear una religión a partir de estos hechos extraordinarios. El Discordianismo gira alrededor de los conceptos del orden y el desorden como partes de una misma cosa: el Caos. El caos no considerado como algo malo, sino el verdadero principio del universo. El caos como el cambio constante necesario para vivir ya que todo lo que se rehúsa a cambiar, muere. El caos como esa flor que nace en una grieta en el cemento del estacionamiento.
Omar Ravenhurst y Malaclypse el Joven escribieron un libro sagrado, el Principia Discordia (el Principio de la Discordia) que se considera la Biblia de los Discordianos.
Malaclypse el Joven
El Principia Discordia contiene un grupo de escritos sin un orden real aparente, incluidas frases y referencias a otros documentos y personajes históricos. Allí se puede encontrar la historia de la Diosa, su dogma, los cinco mandamientos (el Pentavómito), sus rituales, fnord (supuestamente el sonido que hace un árbol al caer en el bosque), el sistema numérico discordiano, e incluso un telegrama de Malaclypse el Joven al dios Jehová Yahweh en el que lo despide debido a su incompetencia, y le pide amablemente que no use su contacto de e-mail como referencia para su próximo trabajo.
Esta religión, como todas ellas, tiene su dogma, aunque es bastante menos complicado que el de muchas otras. Por ejemplo, para convertirse al Discordianismo solo hay que seguir un sencillo ritual, descrito en el Principia Discordia:
Se requiere que el Discordiano salga solo un viernes y disfrute gozosamente de un perrito caliente. Esta ceremonia es una protesta en contra de los paganismos más populares de la actualidad: el de los católicos (no comer carne los viernes), el del Judaísmo (no comer carne de cerdo), el del Hinduismo y Budismo (no comer carne de ningún tipo), y el del Discordianismo (no comer el bollo de pan del perrito caliente).
Asimismo, una vez convertido al discordianismo, cualquier adepto puede y debe, sin pedir permiso a nadie, hacerse sacerdote, Papa, profeta, santo, o cualquier otro título discordiano. De hecho, existen muchos sitios discordianos que pueden proveerte de la documentación necesaria para probarlo. Sin ir más lejos, yo soy Papisa discordiana, ¡con licencia y todo! Tengo que imprimirla, plegarla, plastificarla y ¡voilà! Papisa en el acto (solo espero que no me empiecen a llamar Juana).
También les transcribo el 5º y último mandamiento del Pentavómito: “El Discordiano tiene prohibido creer todo lo que lee, incluyendo los presentes cinco puntos.”
the hand of Eris
El Discordianismo es irreverente, delirante y sorprendentemente lógico, con una filosofía que aun mi cabeza poco filosófica logra entender... Es una religión tomada a broma, o una broma hecha religión, como lo quieran ver. Era obvio que me iba a interesar.
Para terminar recuerden que, según los discordianos, a Eris, la diosa del Caos, la Discordia y la Confusión, nada la divierte más que que hagan planes - así los puede estropear...
"No hay tiranía en un estado de confusión."
Eris
¡Ufa! ¡Miren lo que el desgraciado de Astrology.com me dijo hoy!
Telling you to lighten up would be easy - unfortunately, at the moment, you won't be able to pull that off. So rather than pretending that the current state of affairs isn't bothering you, do just the opposite. Wallow in the unfairness of it all. Then get up tomorrow and start over.
Total Descreimiento. Ahora ni siquiera creo en esas gráficas ilegibles. Pueden empezar a decirme nihilista.
(con todo el dolor del alma, le mandé smiley ¡ufa! a la Tere. Snif.)
Diganme, ¿ustedes creen en los horóscopos? Yo en realidad no creo mucho. Bah, más bien no creo nada. Nunca me pasó nada que debiera pasar según ninguna predicción - aunque tengo que aceptar que no sé si lo recordaría si así fuera, no les suelo prestar demasiada atención.
Sin embargo, no hay vez que no agarre una revista o diario y que no vaya automáticamente hacia la sección del horóscopo, lea lo que le depara el destino a los libranos del mundo y lo desestime inmediatamente. Es como medio contradictorio, ¿no? ¡Soy irreverente y esclava a la vez!
Así fue como, con una vida de descreimiento y sumisión a mis espaldas, me suscribí a Astrology.com el año pasado.
Era una oferta atractiva. Se suponía que te iban a mandar un pronóstico diario a tu casilla de mail, darte tips para encontrar la pareja ideal, la carrera perfecta y ¡hasta hacerte adelgazar! (seguramente eso fue lo que me enganchó al final) Creo que si los presionabas un poco hasta te decían qué posición en la cama era la más adecuada para cada día (después de encontrarte la pareja ideal, imagino, sino podría ser un poco frustrante). Aparte de astrología occidental, Astrology.com también ofrecía: lecturas de Tarot y Feng Shui diario (¿qué puta es el Feng Shui, alguien sabe?), lecturas Psíquicas, Numerología y Horóscopo Chino (soy un lindo mono en el horóscopo chino, por si les interesa). Completito.
La cosa es que Astrology.com me sorprendió. No estoy muy segura todavía de si le embocaron en los pronósticos, pero no importa, no es ese el parámetro que estoy usando para decir que Astrology.com es un buen sitio. El tema es que las predicciones ¡son geniales! Me encantan. Son entretenidas, ocurrentes, bien escritas y siempre me hacen reír. ¡Y las leo! Incluso las he usado varias veces como frase para el msn.
Hasta trae unas lindas grafiquitas que parecen muy profesionales. No las entiendo mucho, pero parece que hoy a las doce de la noche voy a tener un encuentro amoroso... voy a ver qué hago con las nenas a esa hora. Seguramente que si no pasa nada, no es que el horóscopo esté errado, sino que no yo interpreté bien la gráfica.
Sí, sí, ya sé. Van a decirme que no le creo a las predicciones, pero sí le creo a las gráficas. Y bueno, una cree lo que quiere, más si le conviene. Ahora, fíjense bien y díganme si no es clarísima. Es evidente que voy a tener sexo fabuloso esta noche, y al que diga lo contrario, lo mato (aparte, le quiero mandar el smiley ¡uff ! a la Tere mañana).
Dejando el asunto de las gráficas a un lado, a veces hace predicciones interesantes también. Acá hay algunas cosas que me ha dicho, progresivamente, a lo largo de varios meses:
Remember back in grade school how the only acceptable way to get someone to notice you was to aggravate them? Pretend you're back there, and someone's recent behavior will finally make sense.
It's like the smell of rain in the air - you can't quite put your finger on how you actually recognize it, but you're sure it's there. Trust that feeling.
You're attracted, but for the life of you, you can't figure out why. Think of this as a gift, and don't shake the box until it's time to open it.
No, you never expected to actually be attracted to someone like him/her - but it happened. Don't fight it. It's exhilarating, and such fun to see your loved ones squirm!
What you want, you'll have - no doubt about it. With this much power in your eager little hands, it might be best to choose your quest carefully.
Obvio que están en inglés, Astrology.com ES un sitio en inglés, y NO voy a traducir, no tengo ganas. Pero en general dicen que voy a conocer un hombre alto, morocho y de ojos ardientes, envuelto en un aire de misterio e intriga, que llegará para amarme apasionadamente… estaría bueno, ¿no? Lástima que no sea así.
Sin embargo, para vos, que sí leés inglés: es un poco preocupante, ¿verdad? Para vos que no: después te cuento.
La gente que me conoce y que me tiene un poquito de paciencia - poquito nomás, chiquito, o sea que e escuchan dos segundos y después hacen que sí con la cabeza - sabe que yo escribía en lo que para simplificar las cosas llamaba: ‘Mi Juego’.
Igualmente, antes de aburrirse, solían interesarse lo suficiente como para preguntar de qué estaba hablando. Las reacciones eran diversas y variadas: algunos temían que les pidiera que leyeran algo – eso se solucionaba apenas sabían que escribía en inglés; no saber inglés era la excusa perfecta; otros pensaban que perdía lamentablemente mi tiempo – mi ex y mi padre, por ejemplo. Mi madre estaba encantada de que practicara mi inglés, a sus ojos eso solo podía traer beneficios – aparte ella siempre me entendió mejor de lo que yo quisiera, sabía lo que significaba para mí. Algunos otros me trataban de loca, pero eso era normal: siempre me tildaron de loca – ahora además de loca me dicen majadera, fanfarrona e insoportable, principalmente la Tere y la Otra; a eso todavía me tengo que acostumbrar, como mis sempiternas pataletas atestiguan.
El hecho es que poca gente realmente entendía a qué me refería con ‘Mi Juego’ y cuando tenía que explicarlo no siempre encontraba las palabras justas. Pero no por tener que explicar a qué me refería al hablar de un ‘juego de rol basado en foros’ (forum based roleplay), eso era la parte más fácil del asunto, lo que era difícil de expresar era cuánto me llenaba pertenecer a ese pequeño grupo de gente que compartía mi placer de escribir. Uno de mis compañeros dijo una vez que era una experiencia liberadora, y yo no pude estar más de acuerdo.
Mi Juego me acompañó por mucho tiempo; escribí en ese sitio alrededor de cuatro años, con una producción de miles de páginas de texto (en colaboración, obviamente). Mis amigos virtuales – y al que diga que no hay amigos virtuales, que me disculpe, porque los hay – me acompañaron cuando estaba bien y cuando estaba mal. Me apoyaron, me hicieron reír, me hicieron llorar, me excitaron y me enojaron, me halagaron y me mandaron al piso, y me exigieron inteligencia, nivel y creatividad constantes – intenté cumplir, no siempre con éxito. ¡Hasta me regalaron una computadora! Ésta, desde la que estoy escribiendo ahora.
Ahora extraño escribir como nunca, y extraño a esa gente aún más – el vínculo no se rompió, pero al no existir el objetivo común de tener que contar una historia, sí se ha distendido, demasiado tal vez. Por eso, esta entrada es de las cosas importantes que quiero compartir con los pobres iluso que estén leyéndome en este momento, o sea con ustedes. De última, apretar la crucecita roja en la esquina superior izquierda de la pantalla es más fácil que hacer que sí con la cabeza, y yo no me doy cuenta de que dejaron de leer.
Bueno, si vencieron la tentación de la cruz roja y leyeron hasta acá, se estarán preguntando a dónde quiero llegar. Buena pregunta, porque yo también me perdí... (¡Ay la Tere!, se debe estar riendo ahora)
Creo que lo que quiero es aclarar algunas cosas sobre qué diablos es un ‘juego de rol basado en foros’ y qué es o era (snif) ‘L.A. by night’ – LAbn para abreviar. Homenajear en cierta forma a toda esa gente a la que aprecio tanto, y generar un espacio para que cuando publique algún post de LAbn no se pregunten: “¿de qué puta(pardon my French)está hablando ésta ahora?” Porque alguno voy a publicar, hay cosas que escribí allí con las que me gustaría aburrirlos, en la medida que se puedan leer independientemente y no sea como abrir un libro en la página 582 sin tener idea de en qué venía, claro. (No importa, siempre te queda el recurso de la cruz roja... ah, y están en inglés, buena excusa para pasarles por arriba)
Esto, entonces, es para Adam (ahora Kaarin), Shaun, Louisa, Dave & Heather, Matt, Kris & Robin, Amanda, Candice e incluso Jaime y Meghan, un selecto grupo de estadounidenses, canadienses, ingleses, australianos y escoceses, que iban de los 16 a los 42 años cuando empezó la odisea de LAbn allá por el 2002. Solo lamento que no sepan español para leerme. También para Alessa, Chance, Kyle, Nik, Darian, Cole, Kate, Oz, Tash, Reah, Daye, Marcus, James y Drea, y todos los demás personajes de LAbn, más reales tal vez que mucha gente real.
(Como soy nueva en esto de los blogs y todavía no he descubierto si se puede revertir el orden en que se publica, voy a mandar todo esto al revés. Si son viejos leyendo blogs, sorry, para mí eso es orden, y es mi blog, así que así quedará)
Bueno, en realidad es muy sencillo. Un juego de estos empieza con un jugador o un grupo de jugadores, gente como ustedes o como yo – bueno, como yo, ustedes seguro son más cuerdos/as – que abre lo que se llama una ‘thread’ en un foro y empieza una historia (thread en inglés quiere decir hebra, como de hilo, no sé muy bien cómo se le dice en español). Esto puede ser más o menos complejo, ya que hay foros donde conviven numerosas threads, que pueden ser completamente diferentes, al mismo tiempo, o hay sitios como lo era LAbn, donde todo giraba alrededor de una sola historia acordada por el conjunto de jugadores.
Ese escritor/es imagina un punto de arranque, un lugar, un tiempo, un universo, el número de personajes que van a participar, etc. o sea todo lo que una historia necesitaría para ser escrita.
A partir de ahí, otra gente del foro ingresa a la thread. Crean un personaje con nombre, edad, sexo, habilidades, historia personal y todo lo demás que hace a alguien especial y único; una vez felices con su creación, se incorporan a la historia con una entrada llamada ‘post’. La historia se empieza a escribir así, post a post, entretejiendo las historias personales de esos personajes alrededor del argumento inicial.
Existen algunas reglas, obviamente: no se puede escribir por un personaje que no sea el propio sin permiso, no se puede matar o dañar permanentemente a otro personaje, no se puede alejar del tema original sin un acuerdo previo, etc.
Al final lo que se logra es una historia completa, de diferente complejidad, calidad o extensión. Los jugadores se unen para escribir sobre los más diversos temas: un viaje en un nuevo mundo, derrotar al malo de turno, conquistar el universo o simplemente escribir sobre un día ordinario. No importa. El resultado siempre es el mismo, diversión. No se pretende nada más.
El tema es que las threads tienen que mantenerse, es decir, tienen que ser interesantes, sorprendentes, imaginativas, y en mi opinión personal, estar bien escritas. La gente tiene que tener ganas, y comprometerse. Si faltan esas cosas, los jugadores se aburren, la historia lentamente se va estancando y todo tu trabajo es en vano, porque inevitablemente, muere. Eso fue lo que pasó con LAbn. Luego de más de cuatro años de una vida próspera y excitante, los jugadores comenzaron a aburrirse, o simplemente ya no tuvieron el suficiente compromiso, tiempo o ganas de escribir y, lamentablemente, murió.
RIP LAbn.
Tanto es así que Friedballoney, el servidor donde estaba hospedado nuesto sitio web, decidió borrarnos del mapa. Así como así. Dave, nuestro administrador, o sea el responsable de la creación y mantenimiento del sitio, nos prometió que va a publicar las temporadas completas de LAbn (8 en total) en una página nueva. Cuando tenga esa dirección la publicaré, por publicarla nomás, estoy segura. No creo que nadie vaya ahí.
No importa. Como decía Adam - bueno, sigue diciendo, solo que ahora se llama Kaarin (no pregunten): "Se aprende a escribir, escribiendo".
Ésta era la portada del sitio, destinada a tentar nuevos jugadores a la arena de LAbn. Ya sé, ya sé, está en inglés. No sean impacientes, abajo está la traducción. Por algún motivo se lee mucho más cursi en español que en inglés, pero ni modo. Acuérdense de la crucecita roja. (Tere, vos estás absolutamente absuelta de leer esto)
What is LAbn?
LA By Night is a Forum based Role Play Game loosely based upon the mythos of the television series Buffy the Vampire Slayer created by Joss Whedon. The series explored the life and trials of a modern day heroine – Buffy, your stereotypical blonde valley girl with just one difference, she also happened to be the Chosen One – the only girl in the world with the strength and skill to save humanity from the plague of the vampire. The popularity of this series spawned the spin-off show Angel – the story of Buffy’s first love – a vampire with a soul and a destiny to be fulfilled.
This is the backdrop to our world. A world of unspeakable evil, of vampires, werewolves and demons. A world of witches and magic, alternate dimensions and government conspiracies.
The world of LA By Night.
In this world Buffy and Angel are no more, their legacy has fallen into the stuff of legends and bedtime stories. Yet evil still lurks in its many forms, be it the ruthless endeavours of humankind or the baneful desires of the undead. In order to readdress the balance new heroes are needed to rise against the forces of evil and stop the world from descending into eternal darkness…
Entangled within this elaborate synthesis of mysticism and human ills are The Players, drawn together from across the globe into this realm by a force unknown. As the world is made up of many people, so is this collective, as diverse and intricate as the world that surrounds them. Hunters, Vampires, Witches, Werewolves, Demons, Angels, Fae, Gypsies – each with a story to be told, their lives inextricably connected by the power of friendship, camaraderie, necessity, hatred and love.
This is where our adventures begins. In the City of Angels, under the cover of darkness, with the watchful eyes of fate upon us.
LA By Night
¿Qué es LA by Night?
LA By Night es un juego de rol basado en foros, fundado libremente en el universo de la serial de televisión “Buffy la Cazavampiros” (Buffy the Vampire Slayer) creada por Joss Whedon. La serie exploraba la vida y aventuras de una heroína actual – Buffy, el estereotipo de rubia bonita californiana pero con una gran diferencia, ella también era la Elegida – la única chica del mundo con la fortaleza y habilidades para salvar a la humanidad de la plaga de los vampiros. La popularidad de Buffy hizo apareciera una segunda serie sobre el tema, “Ángel”, la historia del primer amor de Buffy, un vampiro con alma y un destino que cumplir.
Este es el telón de fondo de nuestro mundo. Un mundo de perversidades impronunciables, de vampiros, hombres lobos y demonios. Un mundo de brujas y magia, dimensiones alternas y conspiraciones del gobierno.
El mundo de LA By Night.
En este mundo ya no están Buffy y Ángel, su legado se ha convertido en leyendas e historias para antes de dormir. Sin embargo, la maldad acecha de muchas maneras, ya sea en las acciones de humanos inescrupulosos o en los deseos de los muertos vivientes. Es necesario reestablecer el equilibrio; nuevos héroes se necesitan para enfrentar a las fuerzas del mal y evitar que el mundo caiga en la oscuridad…
Mezclados en este crisol de supernaturales y humanos están Los Jugadores, atraídos de todos los puntos del globo a esta arena por fuerzas desconocidas. Un grupo complejo y diverso como el mundo que los rodea. Cazadores, vampiros, brujas, hombres lobo, demonios, ángeles, elfos, gitanos… cada uno con una historia que contar, sus vidas intrincadamente conectadas por el poder de la amistad, camaradería, necesidad, odio y amor.
Aquí es donde nuestras aventuras comienzan. En la Ciudad de Ángeles, bajo la cubierta de la oscuridad, con los ojos atentos del Destino sobre nosotros.
LA By Night
Dicen que las personas de libra no somos equilibradas, aunque el símbolo de nuestro signo zodiacal sea la báscula; que estamos siempre ‘buscando’ el equilibrio. Yo lo he constatado en varios aspectos de mi vida – sobre todo cada vez que me subo a una balanza... estoy segura de que es kármico eso: ¡balanzas!!! ¡Me persiguen!! Algo debo haber hecho en una vida anterior para merecerlo; me consuelo pensando que seguro me acosté con un cura rubio y de ojos azules y un metro ochenta y... Perdón, me voy del tema, volvamos al equilibrio.
Equilibrio. Según el Buscón de la Real Academia, equilibrio es el ‘estado de un cuerpo cuando fuerzas encontradas que obran en él se compensan destruyéndose mutuamente.’ Suena bien, ¿no? Parece hasta inteligente. Pero claro, los Académicos deben ser gente inteligente. Yo tengo una tía Académica. También era Ramera (en eso no demostró ser inteligente, o sí, yo que sé. Está en España ahora, codeándose con Fernández de Alba y Pérez-Reverté.) Ufa, ando por las ramas otra vez. Es una mala costumbre que tengo, aunque la Tere dice que soy graciosa. No sé. Para mí que se aburre en las salas de Chat, nomás.
Volvamos al equilibrio, y van...
OK. La definición del Buscón. Estoy de acuerdo con que suena inteligente, pero está MAL, no es correcta, es un desastre universal, tan infame como mi chifladura con las balanzas. Ahora seguro ustedes se preguntarán cómo me atrevo a desafiar una definición de la RAE. Es simple. Lo hago porque conozco del delicado equilibrio entre el ‘uff’ y el ‘ufa’, y me niego a pensar que son !‘fuerzas encontradas que se compensan destruyéndose mutuamente’!
Cuando era chica me gustaba buscar parónimos, era una costumbre que tenía. Pasé de la papa y el Papa – ejemplo de escuela - hasta polvo y polvo... pero claro, ahí ya era más grandecita. Ahora me siguen gustando, y si uff y ufa no son parónimos, es por muy poquito, ¿no? ¿Total? ¿Qué le hace una letra más o menos?
Uff y Ufa.
Increíble. Sacamos una F, ponemos una A, y cambia completamente la palabra, su significado y la forma en que te levantás en la mañana.
Porque la diferencia entre uff y ufa es la sonrisa matinal, ¿vieron? Y el babeo – dijera la Tere. La Tere la tiene muy clara, y puede ser muy clara cuando quiere. Demasiado. Por las dudas hay que tratar de mantenerse fuera de su línea de tiro, o conseguir escudo... un chivo expiatorio de preferencia. La tiene tan clara que hasta tiene un smiley para esas mañanas (la Otra, la innombrable, también tiene un smiley propio, pero eso es otra historia). La Tere me manda su smiley uff cuando está fanfarrona. Yo de puro amor propio no se lo uso, ¡tengo que encontrar uno solo para mí que exprese la inmensa dicha, la infinita satisfacción, de estar muy bien cogida!
¡Porque eso es andar uff! Andar uff es levantarse flojita y contenta, sabiendo de la obligación cumplida, o mejor dicho, de la obligación que le hicimos cumplir. Es levantarse flotando, o, dijera Fernando Schmidt, con borrachera de amor. Pero el amor no es requisito indispensable. Digamos que con borrachera de sexo, que es la mejor, si me preguntan – no te da dolor de cabeza y es buenísima para el hígado. Bah, para el hígado, para la piel, para el pelo, para los dientes, para las uñas, para... todo!
Eso es el uff. Vayamos ahora al ufa. ¿Qué es el ufa? Por oposición, ufa debería ser lo contrario a uff, pero en realidad no funciona de esa manera. El ufa es más universal, y por lo mismo, mucho más light y más frecuente y lo ameritan los más diversos motivos. Por ejemplo, yo largo un ufa por pavadas como irme por las ramas, pero lo mando también por tragedias como cuando mi amorcito – léase proveedor de los más diversos y satisfactorios uffs – me dice que no puede verme hoy. Dos problemas tremendamente diferentes y diametralmente importantes.
Obviamente, los ufas aumentan cuando empiezo a sentir el síndrome de abstinencia de uffs, lo que me hace pensar ¡cuán acertados están los tipos cuando te dicen mal atendida solo porque andas de mal humor! ¡La puta madre, cómo odio darles la razón!
¿Quedó claro el tema de los uffs y ufas? Bien, volvamos al equilibrio - y esta vez sí las conté. Van tres.
Imaginen que ponemos el uff en un plato de la balanza y el ufa en el otro. Sin duda que parte de la definición de la Real Academia se aplicaría: las fuerzas encontradas se encontrarían en un cuerpo… ¿El mío? Mmmm, mejor no pienso en cuerpos o seguro me vuelvo a extraviar. Empecemos otra vez; las fuerzas encontradas se encontrarían en la famosa balanza – una de esas bonitas, como la de la Sra. Justicia. Del lado izquierdo pongo el uff. Me gusta más a la izquierda, será porque es siniestra, y del lado derecho el ufa. El ufa siempre es más abierto, más sincero; por eso va a la diestra. No tiene nada que ocultar, a menos que oculte falta de uffs, claro.
Estem, creo que me perdí… ¿por dónde iba? Ah, sí. Fuerzas encontradas. Platillos de Balanza. Uff y Ufa. Sí. Sigamos. Si la vida de una es más o menos normal, lo natural es que esos platillos estén más o menos balanceados. Una muy, muy buena noche contra el ómnibus que se pierde por quedarte dormida, el taco que se rompe por correr al ómnibus y la media que se corre por sacarse el zapato... Un mañanero largo y perezoso contra el jefe que indudablemente no tuvo tu suerte con la rubia boba, lo llamó la ex-esposa para pedirle plata y tiene un humor de perros… y así seguimos.
Se entiende, ¿no? Por cada excelente, inolvidable, desestresante uff, hay un sinnúmero de ufas. Eso mantiene el equilibrio natural de las cosas. Nadie puede vivir en una nube de uffs, sería contraproducente, casi como vivir en una nube de pedos.
Equilibrio. Bendito equilibrio.
Ahora dirán, ¿qué problema hay con la definición? Bueno, en realidad la parte de la definición que yo cuestiono es la final. ¿Cómo es posible que las fuerzas encontradas se compensen destruyéndose mutuamente? ¿Quiere decir eso que hay un duelo a muerte entre uffs y ufas? ¿Que voy a tener que privarme de los uffs para poder vivir sin ufas? Ahí es dónde la definición está mal. TIENE que estar mal. ¡Porque no tengo la más mínima intención de permitir que mis ufas terminen destruyendo mis uffs!
Equilibrio. Maldito equilibrio. Rompámoslo.
Por eso hoy le puse demasiada azúcar al café de mi jefe, le escondí los sellos y le cambié los números pre-discados del teléfono de su escritorio – la rotisería por su mamá. También configuré la hoja de Word para tamaño Carta en vez de Continuo Alemán Standard y archivé la cuenta de la zapatería por la P de pie en vez de la Z. Suficiente para provocar un sinfín de ufas… y romper el equilibrio.
Total. Dicen que las personas de libra no somos equilibradas, sino que vivimos buscando el equilibrio. Sinceramente, estoy ansiosa. Ansiosa y no poco expectante. No puedo dejar de imaginar los esfuerzos que va a tener que hacer el Amigo para intentar equilibrar mi balanza después de tanto ufa. ¿Y ustedes?
somewhere i have never travelled, gladly beyond
any experience, your eyes have their silence:
in your most frail gesture are things which enclose me,
or which i cannot touch because they are too near
your slightest look easily will unclose me
though i have closed myself as fingers,
you open always petal by petal myself as Spring opens
(touching skilfully,mysteriously) her first rose
or if your wish be to close me, i and,
my life will shut very beautifully, suddenly,
as when the heart of this flower imagines
the snow carefully everywhere descending;
nothing which we are to perceive in this world equals
the power of your intense fragility: whose texture
compels me with the color of its countries,
rendering death and forever with each breathing
(i do not know what it is about you that closes
and opens; only something in me understands
the voice of your eyes is deeper than all roses)
nobody, not even the rain, has such small hands
Decir que vivo del idioma y que por eso me interesó el tema sería absurdo, así que no lo diré (aunque el sueldo que cobro cada mes compruebe que SÍ vivo del idioma) Este artículo no compete únicamente a las personas que están vinculadas a la lengua y la lingüística, y por eso me pareció interesante compartirlo.
“Cuando muere una lengua” selección extraída de "When a Language Dies" de John Ross – 25/11/2005 – traducido del azteca por Miguel Leon Portillo, traducido al inglés por John Ross, y traducido del inglés por mí. Mi Dios, ¡esto sí parece la Torre de Babel! (¡Mi dios! ¡Estoy mimetizándome con el Amigo!!).
Primero mata el lenguaje, luego la cultura
Cuando Muere una Lengua
Cuando muere una lengua,
las cosas divinas,
las estrellas, el sol y la luna,
las cosas humanas,
pensar y sentir,
ya no se reflejan
en ese espejo.
El planeta en el que vivimos ya no es la Torre de Babel que supo ser. Como la bio-diversidad, la diversidad lingüística está muriendo a un paso alarmante. Según la UNESCO, de 6000 lenguajes humanos conocidos, la mitad están en peligro inminente de desaparecer y el 90% de ellos podrían ser borrados para siempre en un año. Asimismo, la agencia cultural de las Naciones Unidas advierte que un idioma se pierde cada dos semanas: cinco idiomas del subcontinente indio fueron borrados del mapa durante el tsunami que azotó las islas de la Bahía de Bengala a principios del año 2005.
Dado que poca gente habla la mayoría de las lenguas del mundo – 4% de la población mundial habla el 96% de sus idiomas – la mayoría de los sistemas lingüísticos son extremadamente vulnerables a las vicisitudes de la vida y la muerte.
La diversidad lingüística florece en el sur – la mitad de los idiomas del mundo se concentran en solo ocho países: Papúa Nueva Guinea, Indonesia, Australia, India, Nigeria, Camerún, Brasil y México. El estado mexicano de Oaxaca, más pequeño que Portugal, alberga 16 grupos étnicos distintos y habla más lenguas que toda Europa.
Cuando muere una lengua
todo lo que hay en el mundo,
mares y ríos,
animales y plantas,
ni se piensan, ni se pronuncian,
con sonidos
que no existen ya.
Si cada idioma fuera una pieza, entonces México sería una gran mansión de sesenta y dos habitaciones. El lingüista, poeta e historiador Carlos Montemayor reflexionó en la reciente presentación de un volumen de poesía mexicana indígena: “Estos lenguajes no son dialectos, sino sistemas lingüísticos completos. El purepecha es tan completo como el griego, el maya tanto como el italiano. No hay sistemas lingüísticos superiores. Todos tienen gramática y sintaxis y vocabulario y etimología. Es una expresión de racismo cultural considerar dialectos a las lenguas indígenas.”
El nahuatl (azteca moderno) es hablado por más de 2.000.000 personas en 15 estados mexicanos. Hay un millón de hablantes de maya en el Caribe mexicano, casi el doble si se incluyen subgrupos del interior del territorio como los chol y tzeltal y tojolabal. El zapotec y el mixteco tienen un importante número de hablantes en las sierras y a lo largo de la costa de Oaxaca. A pesar de 500 años de imposición cultural durante los cuales los invasores europeos quemaron libros sagrados en piras públicas y prohibieron el uso de las lenguas autóctonas bajo pena de muerte, los indígenas de México han rehusado ser silenciados.
...
Cuando muere una lengua,
se cierra a todos
los pueblos del mundo,
una puerta, una ventana,
un asomarse
de modo distinto,
a las cosas divinas y humanas
que suponen ser
y vivir en el mundo.
Cuando muere una lengua,
sus palabras de amor,
de dolor y querencias,
tal vez las viejas canciones,
los relatos, los discursos, las plegarias,
nadie, no importa quién,
alcanzará a repetir.
Cuando muere una lengua,
ya muchas han muerto,
y muchas más morirán,
espejos para siempre quebrados,
sombras de voces
para siempre acalladas.
La humanidad se empobrece
cuando muere una lengua.
En la mitología griega, Eris es la personificación del Caos y la Discordia.
Eris no forma parte de los dioses mayores aunque es hija de Zeus y Hera, concebida cuando la diosa tocó una flor - irónico, ¿no?, que la diosa de la discordia nazca de ese contacto tan delicado. Es hermana gemela de Ares, dios de la guerra, y hacen un buen equipo, ya que provoca los recelos que luego llevan a las guerras que él aprecia tanto. Sus hijos eran el Dolor, el Hambre, la Pena, las Mentiras, la Ruina y otras calamidades.
Eris es conocida sobretodo por haber lanzado la manzana con la que Paris iba a elegir a la diosa más hermosa, hecho que originó la guerra de Troya, narrada en la Ilíada.
Todos los dioses habían asistido a la boda de Tetis (divinidad marítima) y Peleo (rey de Ptía Tesalia) , pero Eris no había sido invitada. Ella, ofendida, llegó y lanzó una manzana de oro con la inscripción "Kallisti" (para la más bella), en medio de la divina concurrencia e indicó que el fruto debía ser entregado a la diosa más hermosa de todas. Las diosas inmediatamente trataron de adueñarse de la manzana, pero cuando Hera, Afrodita y Atenea entraron todas se apartaron, ya que ellas eran las más poderosas.
La disputa entre las diosas no se hizo esperar, y como no había solución al problema ya que los dioses no querían tomar partido, Zeus las envió al monte Ida, en la Tierra. Allí se encontraba Paris, príncipe troyano, elegido para dar veredicto sobre tan importante cuestión. El joven primero tuvo miedo, luego cada diosa le ofreció lo que estaba en sus manos para que la eligiera: Atenea le ofreció la sabiduría y el triunfo en la guerra, Hera el poder y la riqueza y Afrodita a la mujer más hermosa del mundo. Paris era hombre y muy joven, obviamente eligió a Afrodita. Fue debido a esta promesa que Paris raptó a Helena, la mujer más bella de la tierra y reina de Esparta.
Así las cosas, Eris logró su cometido, pues causó la confrontación entre las diosas que derivó en una guerra que se prolongó diez años entre los mortales.
EriSada © 2007/2021 | Publicación y Diseño: Ana Laura López