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martes, 29 de mayo de 2012

7

Gatos

Como tras los mullidos ves tres gatos
a su trisagio erótico ceñidos,
saltar por los tejados, aguerridos
como otros D'Artagnan, Porthos y Athos,

pasas a depender, no de insensatos
pensamientos ajenos repetidos
ni de tu larga deuda de descuidos
sino del paso de estos gatos gratos.

El primero te quita de lo humano
sin llevarte por eso a lo divino;
el segundo te anima la sonrisa;

con el tercero, piensas, de la mano,
más cabal, de la cola del felino:
¿a qué, no siendo humanos, tanta prisa?
Ida Vitale

domingo, 27 de junio de 2010

9

José Ángel Valente o la cortedad del decir

“En el principio fue el verbo”
Juan 1:1-5



Mi director muchas veces me pide que lo asista con los temas informáticos, así que hago gráficas, retoco fotografías, o a veces le busco información sobre temas o artistas en Internet. Ninguna de estas cosas me molesta, en general todo lo que tiene que ver con la informática me gusta, y además, tiene sus beneficios. Yo le llamo 'serendipia inducida', porque investigar sobre lo que él me pide, suele abrirme puertas para que yo siga revolviendo -como si fuera mesa de liquidación- en otros temas que se conectan y me llaman la atención. Así me pasó con Gao Xingjian; y así me pasa ahora con José Ángel Valente y ‘Tres Lecciones de Tinieblas’.

José Ángel Valente (1929-2000) es un poeta y ensayista español, ganador de diferentes premios, incluyendo el Príncipe de Asturias de Letras en 1988 y el Premio Nacional de Literatura en forma póstuma en el 2000. ‘Tres Lecciones de Tinieblas’ es un pequeño poemario escrito entre 1978 y 1980.

Lo que me atrapó de Valente, aparte de una poesía que parece transparente y me gustó mucho –y yo no soy demasiado adepta a la poesía, si he de ser honesta– es lo que leí sobre él una vez que dejé de leer poemas y empecé a interesarme por el autor. Tal vez mi lectura del poeta esté equivocada, y yo haya entendido todo al revés, pero intentaré explicarme.

La lingüística me interesa, soy profesora de lenguas al fin y al cabo, aunque no enseñe español, y trato de escribir aunque no sea escritora. Sin embargo, como con todas las otras cosas que hago aparte de escribir en mi blog, intento hacerlo de la mejor manera posible.

Dentro de ese esquema, me tiene bastante preocupada el tema de la ortografía y la gramática: los signos de puntuación bien usados me enloquecen y los tildes diacríticos me mortifican. Releo varias veces cada entrada y sigo corrigiendo aún después de publicar. Pero ese es sólo un eje de lo que es escribir. Saber unir las palabras en una forma adecuada, manejar la ortografía, sintaxis, gramática... es estructura. Y la estructura es importante, todo texto la necesita, pero lo esencial es el contenido.

El tema del contenido me obsesiona todavía más. Uno puede aprender a  escribir correctamente: elegir bien entre poner una coma o un punto y coma, o saber cuándo ‘cuando’ lleva tilde y cuándo no; digamos que si uno hace bien los deberes, todo eso se puede aprender. Pero no se puede ‘aprender’ a tener cosas para decir... eso ya es harina de otro costal, y saber cómo decir cuando hay qué decir, es harina todavía más blanca de otro costal mucho más chico y exclusivo.



Ustedes se preguntarán qué tienen que ver Valente y sus lecciones de tinieblas con mi estructura y contenido, pero bueno, déjenme llegar. Valente tampoco es lingüista, pero tiene sus propios conceptos sobre el lenguaje y las palabras que ‘resonaron’ conmigo.

‘Tres Lecciones de Tinieblas’, escrito entre 1979 y 1980, es un libro pequeño de catorce poemas, que se dividen en tres ‘lecciones’. La primera de las tres secciones, la ‘Primera Lección’, consta de cinco poemas, la segunda lección cuatro poemas y la tercera cinco de nuevo; cada poema tiene por título una letra del alfabeto hebreo.

Como dice el propio Valente: ‘Contempladas en su conjunto, las lecciones ofrecen dos ejes. Un eje vertical y un eje horizontal. El eje vertical es el de las letras, que permitirían leer, como en un acróstico, todo el lenguaje y en él toda la infinita posibilidad de la materia del mundo. El eje horizontal es el eje de la historia, el eje de la destrucción, de la soledad, del exilio, del dolor, del llanto del profeta.’

Es el eje vertical el que me interesó: el lenguaje y sus infinitas posibilidades. Es el qué decir y el cómo decir. Pero también es – en mi lectura lega – esa realidad que el lenguaje no logra expresar, pero que está contenida en el lenguaje mismo; todo lo que se ha dicho y se puede llegar a decir, usando siempre las mismas palabras. El lenguaje tiene la capacidad de decir cosas, pero a la vez tiene un carácter lineal y sucesivo que lo limita, a eso llama Valente ‘la cortedad del decir’. El concepto tiene una sencillez y a la vez una complejidad que me impresionó.

Sin ninguna duda ésta es una lectura muy superficial de un autor con ideas muy complejas, pero es la que puedo hacer aquí y ahora. Me gustaron mucho sus poemas, son breves, livianos de palabras y muy elocuentes, tiene qué decir y sabe cómo decirlo; y sé bien que cuando Valente habla de la cortedad del decir se refiere a otra cosa, pero pienso que la frase también se puede aplicar a esa economía de medios admirable que utiliza para expresar tanto con tan poco.



De la primera lección de ‘Tres Lecciones de Tinieblas’ y precisamente en el tema de los ejes:

Dalet
Tejí la oscura guirnalda de las letras: hice una puerta: para poder cerrar y abrir, como pupila o párpado, los mundos.



Y en otro tema, pero igual de elocuente...

El temblor
La lluvia
como una lengua de prensiles musgos
parece recorrerme, buscarme la cerviz,
bajar,
lamer el eje vertical,
contar el número de vértebras que me separan
de tu cuerpo ausente.

Busco ahora despacio con mi lengua
la demorada huella de tu lengua
hundida en mis salivas.

Bebo, te bebo
en las mansiones líquidas
del paladar
y en la humedad radiante de tus ingles,
mientras tu propia lengua me recorre
y baja,
retráctil y prensil, como la lengua
oscura de la lluvia.

La raíz del temblor llena tu boca,
tiembla, se vierte en ti
y canta germinal en tu garganta.



Los invito a leer más poesía de este autor, por ejemplo, aquí, aunque supongo que mis lectores españoles ya lo conocerán bien.



Imagen:‘Emotional’ de ~marlafinger

lunes, 14 de diciembre de 2009

2

Notas para un blues

Do
     lor por estar contigo en cada cosa. Por no dejar de estar contigo en cada cosa.
Por estar irremediablemente contigo en mí.

Re
     cordar que mis monedas no me permiten adquirir. Que
mi deseo no es tan poderoso como para taladrar blindajes,
ni mi atrevimiento tan hábil como para no hacer saltar la
alarma. Recordar que sólo debe mirar los escaparates.

Mi
     edo por no llegar a ser, por ni siquiera conseguir estar.

Fa
     cilmente lo hacen: clavan sus espinas invisibles, abren la
puerta del temor, hacen que renieguen de mí misma cuando
menos se espera. Y ni siquiera saber cuántos han sacado copia
de mis llaves.

Sol
     o he logrado el punzón de la pica, la lágrima del diamante
o los caprichos del trébol. Quizá no existan los corazones.
Quizá es que sea imposible elegir.

La
     bios sellados, custodios del mejor guardado secreto, del recinto en donde las palabras reanudan
sus batallas silenciosas, sus pacientes y refinados ejercicios de rencor.

Si
     crees que es paciencia, resignación, inmunidad o anestesia te
equivocas. Es que he procurado cortar todas las margaritas
para no tener que interrogarlas.




Ana Rossetti

0

Strangers in the night

Cuando en la noche surge tu ventana,
el oro, taladrando los visillos,
introduce en mi alcoba tu presencia.
Me levanto e intento sorprenderte,
asistir al momento en que tu torso cruce
los cristales y la tibia camisa
sea a la silla lanzada.
Mi pupila se engarza en el encaje
y mis pies ya no atienden, de las losas, el frío.



Ana Rossetti

domingo, 6 de diciembre de 2009

0

Sí, lo he deseado

Que tu lengua abrace
mis labios.

Que recorras uno a uno mis pliegues,

saboreando
el rastro húmedo de mis vertientes.


Que mis manos le enseñen a tus manos

dónde
quiero guardar tu tacto amargo.


Que te bebas mi carne y te comas mi llanto.


Sí, lo he deseado.












Imagen: 'Blue girl' de Audrey Kawasaki

lunes, 9 de noviembre de 2009

2

El temblor

La lluvia
como una lengua de prensiles musgos
parece recorrerme, buscarme la cerviz,
bajar,
lamer el eje vertical,
contar el número de vértebras que me separan
de tu cuerpo ausente.

Busco ahora despacio con mi lengua
la demorada huella de tu lengua
hundida en mis salivas.

Bebo, te bebo
en las mansiones líquidas
del paladar
y en la humedad radiante de tus ingles,
mientras tu propia lengua me recorre
y baja,
retráctil y prensil, como la lengua
oscura de la lluvia.

La raíz del temblor llena tu boca,
tiembla, se vierte en ti
y canta germinal en tu garganta.


José Ángel Valente

sábado, 20 de septiembre de 2008

1

Ode to Eris

Sing now, my muse, of the Goddess of Chaos,
Arising from primeval Quantum foam born,
Goddess of Entropy, Goddess of Anarchy,
She who creates and destroys innumerable cosmos
In the gap between dawn and the rise of the sun,
She who dances between unseen fractal dimensions,
In a small still place all enfolded in storm,
Where tempests so huge, lighting rends open the quasars,
So massive no light escapes from her shroud,
She who sunders our soul from our sweet earthly flesh,
And brings us rebirth with her ghastly sweet breath,

She dances a dance on the edge of a knife, and She never misses one step in the dark...

Lover of Death and Lover of Life,
She dances a dance on the edge of a knife,
A gulf of 10.000 light years on each side,
And She never misses one step in the dark,
Singularity bound, in a teardrop of light,
Cocooned in the smallest, suffused in the largest,
Immortal Chaos wreathed with broken planets and dust,
Thy name is Eris, world shattering Goddess,
We ride your wave breathless and are towed under again.
Singularity Goddess, you approach inverse zero,
Still more drowned worlds loom in Thy billowing shroud.
Asleep and awake she dreams our creation,
The sound of a bell in an dark empty cavern,
The scent of a rose in a room long abandoned,
The dance of the motes in the eye of the Goddess,
The touch of a breeze in the heat of the noon,
The taste of wine from an ancient tomb offering
She is there always, and not there ever,
Look and you will miss her,
Close your eyes and she is before you.
Most terrible and most beautiful name of the Goddess, Eris!



"Book of the Goddess"
Anna Livia Plurabelle

miércoles, 9 de abril de 2008

2

Fire and Ice

Some say the world will end in fire,
Some say in ice.
From what I've tasted of desire
I hold with those who favor fire.
But if it had to perish twice,
I think I know enough of hate
To say that for destruction ice
Is also great
And would suffice.

Robert Frost


viernes, 25 de enero de 2008

0

Llegó tan hondo el beso

Llegó tan hondo el beso
que traspasó y emocionó los muertos.

El beso trajo un brío
que arrebató la boca de los vivos.

El hondo beso grande
sintió breves los labios al ahondarse.

El beso aquel que quiso
cavar los muertos y sembrar los vivos.



Miguel Hernández


martes, 18 de diciembre de 2007

4

Señor, si usted sabe. . .

Señor,
si usted sabe
que yo ahora estoy celosa
por lo que me ha dicho,
tenga al menos el detalle de no hacérmelo notar durante
la cena.

(Nunca en mi vida enrollé espaguetis con tanto odio.)

Almudena Guzmán

domingo, 2 de diciembre de 2007

0

Desnudo en Sombra

Volverse a enamorar.
Besar una piel que sabe distinto,
no encontrar puntos de referencia
que indiquen el momento justo, la caricia perfecta,
la mano compañera.
Retornar a un cuerpo nuevo
sin los huecos del anterior,
no poder palpar una nuca excitada,
una espalda con escalofríos conocidos.
Qué pobre se queda el intento de amar igual a la primera vez.
Cómo pesa una boca tan sabida,
tan llena de humo compartido
ante la desconocida tan poco explorada, tan miedosa.
Cuánto cuesta abandonarte, lavarme de tu olor,
quitarme las huellas de tu peso,
desdoblarme en otra Almudena
y comenzar a hacer mía una figura
de la calle que me asusta y que ¿quiero?
poseer, pero... tú, ahí estás tú,
traspasando con tu desnudo mi sombra,
consolándome pesaroso de mi dolor al terminar,
tu sonrisa y tu cigarrillo,
ese brazo moreno rodeando mi cintura
y llevándome a un lecho desordenado...

y tus manos de violinista
volando y enredándose en mis senos.

Almudena Guzmán

lunes, 26 de noviembre de 2007

0

She walks in Beauty



















She walks in beauty, like the night
Of cloudless climes and starry skies;
And all that's best of dark and bright
Meet in her aspect and her eyes.
...

George Gordon Byron

sábado, 24 de noviembre de 2007

0

somewhere i have never travelled

somewhere i have never travelled, gladly beyond
any experience, your eyes have their silence:
in your most frail gesture are things which enclose me,
or which i cannot touch because they are too near

your slightest look easily will unclose me
though i have closed myself as fingers,
you open always petal by petal myself as Spring opens
(touching skilfully,mysteriously) her first rose

or if your wish be to close me, i and,

nobody, not even the rain, has such small hands

my life will shut very beautifully, suddenly,
as when the heart of this flower imagines
the snow carefully everywhere descending;

nothing which we are to perceive in this world equals
the power of your intense fragility: whose texture
compels me with the color of its countries,
rendering death and forever with each breathing

(i do not know what it is about you that closes
and opens; only something in me understands
the voice of your eyes is deeper than all roses)
nobody, not even the rain, has such small hands



ee cummings
margaritas-lluvia

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