buf!! claro y conciso y extremadamente sensual... desde el punto de vista de como está escrito te envidio el final porque yo cuando escribo relatos suelo estropearlo (eso suponiendo que estuviera bien hasta entonces) con la resolución final. En tu caso es espectacular, porque es como una explosión que llega cuando se está saboreando el jugo...impresionante... te he votado en el concurso y has subido al puesto 9º juis juis :-)
Karlita, tienes todo mi permiso para recitárselo al enamorado que desees, espero que te dé resultado :D
Vicente, ¡es que el señor estaba lejos!! Este textito es la 'mejora' de un mensaje de texto que envié hace unos años... por suerte después pudo hincarme diente a mí también ;)
Los duraznos acá son deliciosos, dulces, frescos y muy, muy jugosos; es mi fruta preferida en esta época.
¡Una hermosa noticia la tuya Ana! Cuanto mejor entonces tú misma que ese rico durazno maduro. Me alegro desde aquí y probablemente cruce pronto a comer duraznos (y damascos y ciruelas), que por allá son mucho más ricos que por acá.
Muy bonito Ana Laura. Me gusta más como suena durazno que melocotón. Es más poético :) Aunque a mi, que me lo den en almíbar, porque la piel me da repelús, jaja. Un beso!
Vicente, si andas por esta zona, no dejes de avisarme, sería muy bueno compartir algún durazno... de los de verdad, claro ;)
Patri, acá no se usa la palabra melocotón, y puesta a pensar... creo que también me gusta más durazno que melocotón. Yo adoro la piel del durazno, me encanta esa sensación.
Huélalo. Muérdalo con ganas… deje que el jugo le invada la boca; arranque la pulpa y saboreé su frescura...
Hola, Ana Laura.
ResponderEliminarEs una invitación muy directa y sensual, buscaré un durazno para hacer la prueba.
Gracias, me alegraste la tarde.
Abrazos.
Que invitación tan... sugerente.
ResponderEliminarNo sé si habrá alguien realmente dispuesto a resistirse jeje.
Un abrazo.
O_O definitivamente cualquiera caería.
ResponderEliminarVaya, con frases así seguro que se consumiría más fruta en el mundo ;) Sin duda es una oferta irresistible
ResponderEliminarbuf!! claro y conciso y extremadamente sensual... desde el punto de vista de como está escrito te envidio el final porque yo cuando escribo relatos suelo estropearlo (eso suponiendo que estuviera bien hasta entonces) con la resolución final. En tu caso es espectacular, porque es como una explosión que llega cuando se está saboreando el jugo...impresionante... te he votado en el concurso y has subido al puesto 9º juis juis :-)
ResponderEliminarEs la invitación más breve y Genial que he escuchado en años!!!
ResponderEliminarbesos
Te ha quedado un post redondo, cortito y que da qué pensar. Apetece fruta. ;D
ResponderEliminarGeniales líneas... Aunque aquí un durazno no es dulce, sino salado y duro...
ResponderEliminarUn beso.
breve y conciso!! no hay más. La verdad es que no me encantan los duraznos, pero está genial para recitarlo a un enamorado... sí, buena idea!!
ResponderEliminar¿Y porqué debería hacer tal cosa ése señor no? ¿Porqué no mejor hincarle el diente a usted misma en vez de al durazno?
ResponderEliminarSé que por allá los duraznos son los más ricos que he probado en mi vida. Por acá ya no tienen tanto gusto.
Saludos!
Rafael, me alegra que te gustara y haberte alegrado la tarde. Los duraznos es lo que tienen, tientan :). Bienvenido al blog!
ResponderEliminarPerséfone, por suerte, aquel al que estuvo dirigida, no se resistió :D
Akasha, jajajaja, esa era la idea.
Alcorze, no lo había pensado. Podría sugerírselos a los marketineros de las frutas, ¿no?
Saludos y muchas gracias por comentar!
Turula, primero muchas gracias por el piropo. Me alegra que te gustara la resolución, creo que le da el toque, sí.
ResponderEliminarY segundo, muchas gracias por votarme en el concurso, me encantan esas noticias, aunque el mejor premio es que sigas volviendo por aquí :D
Un saludo grande y mucha suerte tú también.
Jo, por suerte una invitación así es difícil de resistir. Gracias.
ResponderEliminarSonix, cómete un durazno :D
Negre, ¡no me digas que los duraznos en España no son dulces!! Qué desilusión... ¿O hablamos de otra cosa?
Bea, simplemente gracias :))))
Abrazos a todas!
Karlita, tienes todo mi permiso para recitárselo al enamorado que desees, espero que te dé resultado :D
ResponderEliminarVicente, ¡es que el señor estaba lejos!! Este textito es la 'mejora' de un mensaje de texto que envié hace unos años... por suerte después pudo hincarme diente a mí también ;)
Los duraznos acá son deliciosos, dulces, frescos y muy, muy jugosos; es mi fruta preferida en esta época.
Abrazos piriapolenses :)
Muy visual tu invitación, me ha gustado.
ResponderEliminarBesos
Creo que voy a empezar a comer más melocotones, aunque no es una de mis frutas preferidas.
ResponderEliminar¡Caray!
ResponderEliminar;-)
¡Una hermosa noticia la tuya Ana! Cuanto mejor entonces tú misma que ese rico durazno maduro. Me alegro desde aquí y probablemente cruce pronto a comer duraznos (y damascos y ciruelas), que por allá son mucho más ricos que por acá.
ResponderEliminarMuy bonito Ana Laura.
ResponderEliminarMe gusta más como suena durazno que melocotón. Es más poético :)
Aunque a mi, que me lo den en almíbar, porque la piel me da repelús, jaja.
Un beso!
Mientrasleo, muchas gracias. Me alegra verte por aquí, te doy mi bienvenida al blog.
ResponderEliminarRoxe, te hará bien, me parece una muy buena idea :D
Cid, supongo que eso quiere decir que te gustó, ¿no?
Muchos saludos y gracias por comentar!
Vicente, si andas por esta zona, no dejes de avisarme, sería muy bueno compartir algún durazno... de los de verdad, claro ;)
ResponderEliminarPatri, acá no se usa la palabra melocotón, y puesta a pensar... creo que también me gusta más durazno que melocotón. Yo adoro la piel del durazno, me encanta esa sensación.
Abrazo!
la piel del durazno es maravillosa.
ResponderEliminary cuando encontrás un vientre con esa misma piel,
con ese mismo tacto al pasar los labios...
abrazo
f
f, ahora el antojo me dio a mí!
ResponderEliminar:)